viernes, 9 de diciembre de 2011

Mazizo Iberico - y 6


Según estos datos, no se conciertan matrimonios entre ganaderos y mujeres del sur de España hasta los años cincuenta de nuestro siglo, aunque son casos excepcionales.
A partir de los años setenta, la nueva generación de ganaderos trashumantes ha roto la norma tradicional, y ya se han olvidado los viejos refranes que decían: "en La Mancha, el que no mancha, tizna", o "más vale tener una mancha en la familia que un familiar en La Mancha».
Las razones de esta nueva tipología matrimonial están en la reducción demográfica de los pequeños pueblos serranos desde los años sesenta hasta nuestros días, llegando en muchos casos al abandono. No ocurre lo mismo en la zona meridional, donde los pueblos con mayor entidad han conservado población, sobre todo femenina, al contrario de los serranos, que son enclaves de ancianos y varones solteros.
En la actualidad tales relaciones se ven favorecidas porque los ganaderos serranos disponen de economía y medios de transporte suficientes para acudir a los pueblos próximos a las fincas y mantener contacto con la población comarcana.


La endogamia de los pueblos pastores lo era para mantener un sistema de propiedad y herencia. Pero también en el caso de los trashumantes se trataba de una endogamia «funcional», ya que, debido a su situación laboral, económica y de aislamiento no podían tener ninguna relación con las localidades próximas a las fincas por su pobreza y alejamiento físico.
El nuevo modelo de trashumancia ha variado en muchos aspectos de la vida pastoril narrada por los viejos mayorales y recitada en coplas y romances. Sin embargo, existen muchos elementos que permiten clasificar a este grupo como colectivo muy tradicionalista en muchas manifestaciones. Son frecuentes casos de generaciones de pastores que llevan trasladándose a la misma finca desde hace más de cien años, bien como asalariados y más tarde como arrendatarios. Lo mismo se puede decir de sus relaciones en la cañada, de los sistemas de contratación e incluso rituales religiosos que hoy siguen practicando.


Posiblemente el interés que los medios de comunicación han mostrado en los últimos años por "los últimos trashumantes", unido a sus propias características, han creado cierta aureola en torno a ellos, sólo mitigada por los escasos rendimientos económicos que hoy consigue el ganadero. No obstante, muchos ganaderos trashumantes poseen el orgullo profesional que no se encuentra fácilmente en otros grupos laborales.
La continuidad de este colectivo se podría asegurar si los rendimientos fueran medios. Pero el hecho cierto es que algunos pastores jóvenes, depositarios de prácticas trasmitidas por sus mayores y capacitados en las nuevas técnicas del manejo y la explotación ganadera, manifiestan su deseo de abandonar la profesión, y no por los viejos tópicos de la dureza de los quehaceres, la separación del hogar o el aislamiento, sino simplemente porque la lana no tiene precio y la carne de cordero está al mismo precio que en 1985.
Fotos: Juan Carlos Labajos Briones 





3 comentarios:

  1. lo explicáis perfectamente
    el transhumante se ha convertido en una especie de "mito" que quizás, aunque sea solo sea por un snobismo (del que esta sociedad adolece en demasia), lo salve de la completa desaparición
    un cordial saludo
    Raúl
    cuadernodeentresierras.blogspot.com

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  2. Bueno Tesón, he entrado en tu blog atraído por la espléndida figura del cuadro que has elegido en tu perfil: "Caminante en el mar de nubes" de Fiedrich, pintor romántico alemán que pretende atraer al espectador al interior del mismo.
    Luego veo que ponéis una información realmente buena sobre una de las actividades tradicionales más importantes: LA TRASHUMANCIA. Ello hace que me haga fiel seguidor de tu blog. Enhorabuena y felices fiestas navideñas.

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  3. Matizando, lo que se comenta sobre la escepcionalidad de los matrimonios entre ganaderos del norte y mujeres de Andalucía, quisiera aportar el caso particular de mi familia. Tanto mi bisabuelo (Miguel Brieva García), como mi tatarabuela (Jacinta Blasco García),fueron ganaderos trashumantes de procedencia soriana (Derroñadas-El Rollo) que casaron con naturales de Hornachuelos (Córdoba)durante el siglo XIX.
    Igualmente, conozo alguna referencia bibliográfica sobre los matrimonios por conveniencia entre los "serranos" y mujeres de Santa Eufemia, en la comarca de Los Pedroches.

    http://chozasdecordobaandalucia.blogspot.com/

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